Inmaculada Martínez.- La enfermera gaditana Mª Antonia González ha realizado su primer viaje de cooperación sanitaria a Camerún cuya experiencia le ha resultado “más que gratificante”. González decidió dar este paso para poder “medirse” y “conocerse”, desarrollando su profesión, “fuera de mi zona de confort, en condiciones adversas”.
Camerún, es uno de los países más pobres de África y con la esperanza de vida más baja del mundo, en torno a los 60 años, además, más del40% de la población vive por debajo del umbral de la pobreza. Enfermedades como la malaria (paludismo) y el cólera, están muy presentes y siguen causando miles de muertes. A estas se añaden la falta de higiene, quemaduras y enfermedades generadas por la falta de atención primaria.
La labor de esta enfermera con la población camerunés se ha extendido a lo largo de doce intensos días de duro trabajo en el quirófano del hospital de Yaundé (capital de Camerún). Entre las dificultades encontradas destaca la escasez de instrumental y material y sobre todo falta de higiene, a lo que añaden problemas de comunicación derivados del idioma.
María Antonia González ha podido realizar, junto al equipo sanitario con el que ha viajado, un total de 290 intervenciones, mayoritariamente sobre cirugía pediátrica, hernias, varicoceles, hipospadias y cicatrices retractiles por quemaduras.
La salud sexual y reproductiva de las mujeres cameruneses también es muy deficitaria, tal y como señala esta enfermera gaditana, aunque el aborto está contemplado dentro del marco legal, las medidas son muy restrictivas y la interrupción del embarazo mediante “métodos caseros” es muy recurrente por lo que la mortalidad en jóvenes se dispara. A esta situación se añade el problema de embarazos tempranos, un 25% son madres antes de los 20 años.
Población Infantil
La malnutrición está presente desde el nacimiento y los pequeños carecen de asistencia primaria donde se lleve control y seguimientos de salud infantil.
Los niños viven la situación propia de un país subdesarrollado con muchas carencias y déficits en todos los sentidos, “ahora eso sí, son niños de sonrisa fácil y miradas llenas de agradecimiento”, apunta María Antonia.
Una experiencia que marca un antes y un después a todos los cooperantes por la dureza con la que se trabaja en el terreno, pero siempre termina resultando ampliamente gratificante y gracias a la cual se forjan lazos de unión entre todos los miembros del equipo, todo promovido por las ganas de mejorar la salud y vida de las personas que desgraciadamente les ha tocado vivir en circunstancias muy diferentes a la nuestra.
Apoyo a la Cooperación desde el Colegio de Enfermería de Cádiz
El Colegio de Enfermería de Cádiz cuenta con un departamento de Cooperación Sanitaria con objeto de prestar apoyo y ofrecer información práctica e imprescindible a aquellos colegiados que trabajen en proyectos cooperativos o bien estén interesados en iniciarse en la labor solidaria, todo ello encaminado a velar por sus derechos como enfermero cooperante o voluntario de manera que pueda realizar su ejercicio con todas las garantías de integración en organizaciones y de seguridad y protección en el terreno.
Asimismo, el Colegio de Enfermería de Cádiz es miembro fundador de la Red Gaditana de Colegios Profesionales para la Cooperación Humanitaria, un organismo en el que están integrados los Colegios Profesionales de Enfermeros, Médicos, Farmacéuticos, Veterinarios, Dentistas y Ópticos-Optometristas de la Provincia, y que se creó para dar respuesta al interés creciente en las actividades de cooperación y voluntariado por parte de los colegiados y con el objetivo principal de canalizar dicha inquietud desde los propios Colegios Profesionales de la Provincia como punto de referencia y nexo para desarrollar actividades conjuntas en esta materia, así como para facilitar el contacto entre dichos colectivos.