Descárgase el informe aquí. Consulte toda la documentación disponible en www.informedoulas.com
El Consejo General de Enfermería ha alertado de la proliferación en España de las doulas, falsas consejeras de las embarazadas, que ponen en riesgo la salud de las madres y de los bebés e incitan a las madres a prácticas más propias de la Edad Media que del Siglo XXI.
Más de 500 de estas figuras han sido localizadas en una investigación que ha realizado la Organización Colegial y que ha concluido con un informe que ha sacado a la luz a las doulas que sin ninguna formación sanitaria, aconsejan a las madres «barbaridades» contrarias a la salud pública y al sentido común. En algunas ocasiones, apartándolas de sus familias, animándoles a evitar cualquier contacto con los profesionales sanitarios e incitándoles al canibalismo con las placentas de sus hijos.
“Estamos viviendo una situación inaudita en un país que presume de tener el séptimo mejor sistema sanitario del mundo. Es increíble que en pleno siglo XXI ocurran cosas de una gravedad extrema como esta”, ha afirmado el presidente del Consejo General de Enfermería, Máximo González Jurado, al inicio de la presentación.
La doula es una figura que no existe legalmente en España ni en la Unión Europea, no son profesionales sanitarios y están fuera de la ley, revela el informe, por lo que cualquiera de sus consejos o actos ponen en peligro la salud de las mujeres y de los niños. Además, esta actividad no está reconocida en el Impuesto de Actividades Económicas y es propensa a formar parte de la economía sumergida.
Equipo multidisciplinar
Un equipo multidisciplinar formado por enfermeras generalistas, matronas, juristasy expertos en derecho sanitario y penal ha analizado de forma exhaustiva todas y cada una de las actuaciones de estas personas, que cobran hasta 1.200 euros por un servicio completo durante el embarazo, el parto y el postparto.
Entre las recomendaciones más escabrosas que les hacen a las madres está la de “no bajarse las bragas” delante de los profesionales sanitarios porque “muchos aprovechan para meter la mano sin avisar” o la de no vacunar a los recién nacidos ni administrarles la vitamina K, necesaria para prevenir la enfermedad hemorrágica del bebé.
“Es increíble que esta gente piense que cuando una embarazada va al ginecólogo les arrancan las bragas, cuando en realidad se busca dar la mejor atención a la salud de ella y de su hijo”, ha destacado González Jurado.
Asimismo, estas matronas piratas consideran que en los hospitales se realiza violencia obstétrica a las mujeres porque “cada vez que le metemos los dedos en la vagina a una mujer la están violentando y cada vez que se hace una episiotomía sin permiso se las está mutilando salvajemente”.
Consejos caníbales
Los enfermeros critican también los consejos “caníbales” que dan estas mujeres, al recomendar a las madres alimentarse con la placenta, ya que “es una práctica común en animales mamíferos”. En los últimos años, cada vez son más las doulas que recomiendan ingerirla para recuperarse del parto y propiciar la subida de la leche. Guisos como la “placenta picante australiana” y el encapsulado de la placenta son algunas de estas prácticas. “Muchas veces recomiendan guardar estas cápsulas durante años, hasta la menopausia de la mujer y tomarlas si les duele la cabeza o les baja la regla, incluso pueden suministrárselas a los niños cuando están alterados”, ha explicado Rosabel Molina, una de las matronas que ha participado en el estudio.
Molina, que ha criticado la constante comparación que hacen las doulas entre las personas y el resto de animales como los simios, ha reprochado que cualquiera pueda hacerse encapsuladora de placenta, ya que ella misma pudo conseguir un título por internet con sólo un par de clics.
“Toda esta información se puede encontrar en internet. Una mujer que quiera saber más y se lea estas páginas puede llegar a dar credibilidad a lo que pone. Algunas doulas dicen a las madres que son ellas las que tienen que ayudarlas porque las matronas sólo sabemos rajarles a cuchillo, violarlas y hacerles la ablación”, ha explicado Rosabel Molina.
Para el presidente del CGE, muchas de estas prácticas son más propias de sectas canibalistas y rituales sectarios que de una sociedad avanzada como la española. González Jurado ha recalcado que la profesión de matrona está regulada por directiva comunitaria y tiene competencias que están reservadas exclusivamente a estas enfermeras especialistas, por lo que no se puede consentir que las doulas invadan estas competencias.
La investigación, que comenzó en julio de 2013, surgió a raíz de la denuncia de una madre que había sufrido los consejos de una doula y había sido prácticamente anulada por ella. “Recibí en la consulta a una señora que quería ayuda y se encontraba muy mal. Le dijeron que no trabajase porque las guarderías no eran buenas para los niños, que necesitaban estar con su madre toda la vida. Querían retirarla por completo del entorno familiar”, ha contado Emilia Redondo, matrona de Atención Primaria de Murcia. A raíz de esto, Redondo comenzó a informarse de lo que era una doula y vio que son mujeres a las que la legislación ni reconoce ni ampara y cualquiera de sus consejos puede poner en peligro la vida de las madres y de los niños.
Riesgos
Desde el CGE han querido remarcar los “grandísimos riesgos” que pueden sufrir las madres y los bebés en el preparto, parto y postparto si se dejan aconsejar por estas mujeres. “Es imprescindible que un profesional supervise el embarazo y pueda detectar problemas que una doula jamás podría porque son personas sin formación”, ha destacado Gloria Boal, vocal de la Comisión Nacional de Matronas del Ministerio deSanidad en representación del CGE.
Además, Emilia Redondo ha comentado que las doulas sólo quieren que las mujeres estén acompañadas por mujeres en los partos, por lo que abogan para que los padres no entren al paritorio. “En muchas ocasiones les dicen que tienen que parir en casa y cuando estas lo quiere hacer en hospitales piden entrar ellas, pero sin avisar a los médicos de que es una doula. Nos ha costado mucho a las matronas que los hombres se impliquen en el embarazo y ahora no es momento de echar atrás todo lo que hemos logrado”, ha puntualizado Redondo, que ha explicado que con algunos de los consejos que reciben, las madres tienen miedo de ir al hospital.
Ante semejantes barbaridades, González Jurado ha recordado que en julio de 2014 se remitió una denuncia a la Dirección General de Ordenación Profesional del Ministerio de Sanidad, pero, a día de hoy, no se ha concretado nada sobre esta práctica. Por este motivo, la institución acudirá a la Fiscalía General del Estado para que actúe de oficio contra las doulas.
Atentado contra la vida y la seguridad de las personas
“Las autoridades sanitarias deberían haber detectado estas situaciones que atentan severamente contra la vida y la seguridad de las personas y vamos a pedir explicaciones a la Fiscalía, al Ministerio y a todas las comunidades”, ha manifestado González Jurado, que ha anunciado que este será uno de los temas que se tratarán en la Conferencia Enfermera que se va a celebrar próximamente con el Ministerio de Sanidad. En este sentido, ha lamentado que algunas de estas doulas sean también enfermeras y matronas. “Vamos a perseguir a estas profesionales que han montado su propio chiringuito para lucrarse, les abriremos un expediente y se les expulsará de la profesión”, ha aseverado González Jurado.